El Coaching es un proceso de entrenamiento personalizado y confidencial a través de un amplio abanico de herramientas de habilidades de comunicación y de liderazgo que ayudan a fomentar el autoconocimiento y el contacto de la persona con su entorno.
A pesar de que se trata de un concepto relativamente nuevo, el origen más intrínseco del Coaching ya estaba presente en las teorías de pensamiento de muchos de los grandes filósofos de la historia, como Aristóteles, Platón y Sócrates.
La esencia del coaching son los resultados, pero el foco del trabajo de un coach son las personas. En este sentido, el verdadero valor de un buen coach consiste en el compromiso y motivación que logre impregnar en la persona, con el fin de lograr la confianza necesaria para conseguir los objetivos fijados.
El coaching sirve para focalizar las conductas que una persona debe mejorar y fijar unos objetivos conforme a estas. Un lenguaje sencillo y directo es un elemento indispensable para comunicar cuales son los puntos a mejorar y para contagiar al equipo a trabajar en mejorar aquellos aspectos necesarios en busca de un mejor desempeño profesional. Hay que tener en cuenta que solo si logramos reconocer de manera inequívoca cuáles son los errores y debilidades que necesitamos mejorar, es cuando podremos mejorar.